Un gin-tonic para mamá

Curioseando por Amazon hace tiempo, encontré este libro, el título me llamó poderosamente la atención, me pareció gracioso e impactante, vi su precio, no llegaba a los diez euros, creo que fueron alrededor de 5 euros, ahora creo que es algo más, y decidí pedirlo. Cuando hace tiempo publiqué la foto en mi cuenta de Instagram, llamó mucho la atención, de hecho fue una de las publicaciones con más likes de 2020, y es que somos muchas las madres que nos tomamos esto de la maternidad con humor, sobreviviendo al día a día con un toque de ironía y sarcasmo.

Me ha costado mucho acabarlo, he de confesar. Es divertido, ameno, capítulos cortos…pero en la vida de un lector se pasa por diferentes momentos y en cada uno de ellos nos apetece un tipo de lecturas. En estos momentos, creo que necesito libros con misterio, intriga, que me animen a continuar leyendo, a querer saber qué pasa, y éste libro no es así. Esta es una lectura divertida, repleta de humor, que posiblemente provoque más de una carcajada, pero no es de esos libros que te empujan a seguir leyendo para saber cómo continua. Es un libro sin más pretensiones que la de pasar un buen rato leyéndolo. Y eso está bien, para determinados momentos de la vida, los libros de este estilo vienen muy bien.

Redactado en forma de diario, Ellen nos irá contando los pormenores de su alocada vida, intentando compaginar trabajo, niños, amigos, familiares…metiéndose en más de un lío, descubriendo a lo largo del año que dura el libro cosas nuevas sobre la maternidad. Nos habla de diferentes grupitos de madres, si eres madre seguro que en el colegio de tus hijos también se organizan los padres y madres por grupitos, luego estamos los espíritus libres como yo, o las raras como yo, o como quieres denominarlo, que no pertenecemos a ningún grupito quizás porque no sabemos encajar nunca en ellos o por quién sabe Dios qué, en fin. Descubre, por ejemplo, que tras la fachada impoluta de algunas personas se esconden preocupaciones, miedos…que todas las madres o casi todas, luchamos por las mismas cosas, que nos sentimos igual, que siempre creemos que las demás nos están juzgando, que las demás lo hacen mejor, que son mejores madres que nosotras…pero que en el fondo, ellas también están sintiendo eso mismo, creyendo que las demás son mejores madres que ellas…

Martes, 8 de septiembre

Primer día de cole. Este año, lo del colegio de los niños lo voy a clavar al cien por cien. ¡Yo puedo con lo que sea! Sí, este año va a ser sin duda mucho mejor- no vo a gritar a los niños, ni a dejar que se atiborren de patatas fritas o que se pasen el día enganchados a la tablet-. Sobre todo y por encima de todo no me dejaré caer rendida en el sofá a última hora para trincarme de golpe el vino que serví a las seis de la tarde y que no he tenido oportunidad de beberme hasta ahora mientras murmuro «¡Qué asco de vida!» repetidamente mientras mi alma se marchita poco a poco…

….Sí, no hay duda de que este año va a ser mucho mejor, seré mucho más organizada. A ver, aún no he tenido tiempo de comprar las fiambreras ni el minimalista vestuario básico, y tendré que tomarle el gusto al té verde (me parece asqueroso), y aún no le he pillado el truquillo a lo del lápiz de ojos elegante y ligero ni a lo de hacer trenzas, pero tengo la serena convicción de que esos no son más que meros detalles dentro de mi gran plan maestro…